¿Lluvia de peces?

 

Sí, ha sucedido en una ciudad australiana recientemente. Los residentes de Lajamanu, un pequeño pueblo en el Territorio del Norte de Australia, afirman haber visto llover peces del cielo durante una tormenta. Según los informes, los peces cayeron del cielo y algunos residentes creen que esto es una bendición del Señor.

 

 

Aunque este tipo de eventos no son comunes, no son desconocidos. En el pasado, ha habido informes similares de lluvia de animales en otras partes del mundo. Los expertos sugieren que es posible que los peces hayan sido arrastrados por fuertes vientos desde un río cercano y luego arrojados al aire durante la tormenta.

 

El incidente ha sido reportado a las autoridades locales y se están llevando a cabo investigaciones para determinar la causa exacta de este extraño suceso. Mientras tanto, los residentes están disfrutando del inusual evento y algunos incluso lo consideran como una bendición divina.

 

Aunque puede parecer extraño e incluso imposible para algunos, la lluvia de animales es un fenómeno real que ha ocurrido en varias partes del mundo a lo largo de la historia. Aunque puede haber explicaciones científicas detrás de estos eventos, también pueden ser vistos como algo mágico o divino por aquellos que los experimentan. Divino o no, y considerando al precio que está el pescado últimamente, para los que se están llevando peces del suelo, una bendición, sí que es.

  • Hace ya unos cuantos años, veraneando en Benicassim, asistí a un espectáculo impresionante, una tromba de agua formidable, se desplazaba de sur a norte casi paralela a la costa pero acercándose a tierra, a simple vista parecía un tornado ascendente que absorbiese agua de mar hacia las nubes bajas, al tocar tierra, en la playa, se disipó.
    Entre la gente que miraba no faltaba quien afirmaba que en las nubes se ocultaba una nave extraterrestre…
    Fue portada en varios medios locales. Si dejo volar la imaginación pienso que, con el agua, subirían peces, crustáceos y demás fauna costera aunque, al menos yo, no tengo noticia de que hubiese después una lluvia de marisco y morralla en los alrededores.



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