El Pentágono sospecha de la existencia de nave nodriza alienígena en nuestro sistema solar

jajaja dijo:
–

Pues como Iker Jiménez, Juan Jose Benítez y a todos los que habéis vapuleado, insultado y tratados de mentirosos tengan razón, las risas que se estarán pegando a vuestra costa.

–
Bueno, yo sólo puedo hablar por mí pero, para empezar, no recuerdo haber insultado específicamente a nadie. Es más: A mí Iker Jiménez me cae bien. Acostumbro a tener su programa puesto todos los domingos por la noche… Si bien no necesariamente prestándole toda la atención todo el rato. Pero entiendo, y me atraen, sus inquietudes por todo eso de «lo misterioso». Y no le recrimino que haya sabido hacer carrera con eso. Ni siquiera me parece especialmente discutible su honestidad para con ello.
–
Por lo que a mí respecta, creo que las muchas complejidades de nuestro mundo interior, las múltiples maneras en que lo proyectamos hacia el exterior, nuestros meros desconocimientos sobre lo que percibimos, o lo imperfecto de esas percepciones y, en definitiva, la infinidad de combinaciones posibles de todos esos factores (tanto a nivel individual como colectivo) dan lugar muy fácilmente a toda esa multiplicidad de creencias y convicciones varias. Sobre extraterrestres y sobre lo que sea. Y eso no deja de ser un enorme y fascinante campo de indagación. Discútanse si acaso los enfoques o puntos de vista desde los que abordarlo.
–
Yo, por mi parte, me declaro (ingenuamente) ilusionado con la idea de llegar a ver alguna mínima confirmación de inteligencia, tecnología, o aunque sean sólo indicios de vida simple, realmente externa a nuestro planeta. Tanto más, siendo que hoy en día se toma bastante en serio esa posibilidad, y que se dedican medios y tecnología a su búsqueda.
–
Pero, en realidad ¿qué tenemos a día de hoy?… Buena pregunta. ¿Por dónde empiezo?
–
Tenemos las muchas ganas de creer en según qué cosas. El llamado «pensamiento mágico», como grata desviación (quizá a menudo inconsciente del todo) de cualquier realidad bastante más empírica… Tenemos una enorme acumulación de supuesta casuística, acumulada ya durante décadas, y ya tan absurdamente abundante y desbordante que no nos tendría que dejar lugar a dudas de que lo verdaderamente real es… (¡Uf, vaya tela!): Que están por todas partes. Que nos visitan y nos observan. Que ya nos han visitado antes. Que todos los logros de la humanidad los han tutelado «ellos». Que están presentes en toda nuestra historia y son los responsables de todas nuestras mitologías. Que nos abducen a gusto y conveniencia. Que están compinchados con los principales gobiernos del planeta. Que mis propios vecinos muy posiblemente sean reptilianos o de cualquier otra especie ajena y extraña… Que los arqueólogos «convencionales» son unos pringaos porque, en su laborioso intentar reconstruir la historia pieza a pieza, desprecian ese infalible pegamento extra-fuerte que son «los extraterrestres», que ya lo hace encajar todo de pxta madre, así de buenas a primeras y sin necesidad de nada más.
–
Tenemos montonazos y montonazos de avistamientos, vídeos, testimonios y «casos no resueltos»… A intentar desligar siempre de entre bulos, montajes, paranoias, alucinaciones y falsedades manifiestas.
–
Tenemos todas las «tesis» de Erich Von Daniken y similares, el grandioso éxito de público de éstas y su aprovechamiento y hasta hipertrofia posterior por sus sucesores. Que hasta llegan a pretender que la «verdad» de la influencia extraterrestre es lo que dicta las fantasías y ficciones de las más exitosas sagas de, por ejemplo, películas de Hoollywood (o novelas, o cómics) y no al contrario.
–
Tenemos todo esto, más el ansia de magia y fantasía de una gran cantidad de público dispuesto a acogerlo… Tenemos el género de ficción y fantasía declarado, y, por otro lado, a todos aquellos a los que no les basta con que todo eso tenga que ser sólo «ficción y fantasía».
–
Tenemos, al final, y aprovechando todo esto… ¡Un enoooorme nicho de mercado!
–
Eso es lo que tenemos en realidad, y como cosa más visible, patente e inequívoca.
–
Argumento recurrente de ufólogo: «Pero es que, si entre tanta casuística, nada más que hubiera un solo caso que fuera real…»…
–
Pues vale y conforme, pero ¿dónde está ese caso confirmatorio del todo entre tantísima otra cosa?… Aún incluso entre pilotos y controladores aéreos como testigos supuestamente fiables y de buena fe, que nadie les niega de entrada.
–
Nadie niega que se den fenómenos, incluso cercanos, a los que se les escapa explicación alguna con los datos de que se disponen… Pero de ahí a extrapolar tan alegremente tooodo lo demás…
–
En fin. Se me hace tarde. Me he enrollado ya mucho con esto, y me hubiera enrollado aún mucho más. No he mencionado explícitamente al Oumuamua ese, ni he desgranado tanto como me hubiera podido llegar a salir todo lo que he querido exponer. Espero haber dado, aún así, una cierta idea de mi punto de vista sobre el particular.
–
@ jajaja:
–
Ahora a ver si nos replica usted algo a lo respondido y tenemos un poco de debate, que no sería la primera vez en estos últimos tiempos en que entra alguien con aparente ánimo de discutir por aquí, se le contesta, y luego ya no aparece más.
–
Saludos.

@ jajaja:
–
Saludos. ¿Me decía usted…?
–
jajaja dijo:

usted debe de estar borracho o toma drogas o ya naciste así

–
Ah, pues vale. Si usted se empeña puede ser cualquiera de las tres. ¿De verdad le parece que hay que ir por ahí?
–

quien va a perder el tiempo en replicar semejante sarta de tonterías

–
La verdad es que calificar cualquier cosa de «sarta de tonterías» es algo muy opinable. Ya algún otro usuario no ha podido evitar responderle a usted con la misma expresión, lo que me sugiere que gasta usted bastante más tono provocativo que argumentos a los que interpelar… Por lo que a mí respecta me parece que ir por ahí tampoco le aclara nada a nadie.
–

Dan ganas de responder a alguien que de verdad se toma en serio una conversación que aporte algo

–
Eso digo yo.
–

pero alguien que repite unas consignas que han quedado obsoletas

–
¿Qué «consignas»? ¿Y quién ha decretado que haya quedado «obsoleto» ningún posible enfoque o punto de vista sobre cualquier tema?
–

que se nota que lo escribes porque tienes que parecer más escéptico que nadie

–
¡Ahí me ha pillao! Será eso. Y será que igual me pagan por eso, o algo… (¡¿?!).
–

y que no hay nada que haga hacer un mínimo esfuerzo mental por responder ni entrar en debate.

–
Creo recordar que a «entrar en cualquier posible debate», más allá de su primera intervención, me tomé la libertad de «invitarle» yo mismo a usted (aunque yo no soy más que un usuario cualquiera y sin mayor autoridad en este sitio que usted mismo). Veo que, sea como sea, sí que ha seguido usted interviniendo (y por cierto que nadie se lo ha impedido ni censurado). Así que sí que ha entrado, al menos, en lo que usted quiera creer que es un debate. Incluso aunque sea para más bien despreciarlo…
¿Y cuál es, por cierto, su «mínimo esfuerzo mental» para con todo esto?
–

El Pentágono ha reconocido que el fenómeno ovni es real y no saben de qué se trata y por eso han creado una comisión para estudiarlos,

–
¡Bueno, vale! Lo que dice el Pentágono, porque lo dice el Pentágono, y el hecho de que se estudie… ¡Si a mí me parece muy bien que se estudie!… ¿Qué más?
–

eso es lo único que se puede debatir

–
¡Ah! ¿Sólo eso y ya está? ¿Y de ahí tiene que salir tan triunfante esa visión acrítica del todo de toda la mitología contemporánea sobre ufología y sus múltiples derivadas?. Pues no se yo si sólo con eso…
–

las consignas de los escépticos negando de una manera ridícula este fenómeno que lleva mucho tiempo acompañando a la humanidad os ha superado y en vez de admitir que habéis estado equivocados y dando pábulo a tíos ridículos quieres seguir repitiendo las tonterías escépticas.

–
¿A quién ha superado qué? ¿Quién, ni de uno ni de otro parecer, ha demostrado a nadie ningún «estar equivocados» en nada, cuando la cuestión es mucho más de puntos de vista más o menos críticos, y de análisis, y de razonamientos, sobre la consistencia de lo que se puede poner de verdad, como quien dice, encima de la mesa?
¿Hemos dejado claro, por cierto, lo que se supone que es un «debate» de verdad?
–

Yo no sé en que mundo vivís

–
Pues disculpe usted que muchos se puedan hacer la misma pregunta con respecto a usted.
–

pero todo está escrito y se puede ver

–
No, ¡si será por cosas escritas en este mundo!
–
A ver: Hágame, o no me haga, el caso que usted quiera a lo que yo diga. Pero ya que estamos (o no estamos si usted quiere) en pleno «debate», déjeme lanzarle una pregunta así al aire. Como por acotar un poco:
De todo ese maremágnum y potaje inmenso que nos llega más o menos a todos (entre el añorado Jiménez del Oso, J.J. Benítez, Iker Jiménez, Enrique de Vicente, Erich Von Daniken, la serie «Ancient Aliens», las supuestas desclasificaciones como de que «sí pero no» del Pentágono o del gobierno que sea, las múltiples revistas, libros y publicaciones varias sobre todas estas temáticas)… ¿Usted cree que algo de lo que nos cuentan, o insinúan, o sugieren entre todos estos, pueda NO ser verdad?
–
Por acotar un poco, digo.
–
En la vida cotidiana, en las cosas de la política, de la la economía… Siempre hay mucha más discusión sobre todo lo que se asevera. Siempre es todo mucho más complejo y discutible, porque así suele demostrar ser la mera realidad. Cualquier supuesto descubrimiento científico de hoy en día demanda ser experimentado, comprobado y contrastado no menos que por duplicado e independientemente.
–
¿Todo esto otro, lo de los ovnis y los extraterrestres (o las caras de Bélmez, ya que las ha sacado usted mismo) forma parte para usted de una realidad «superior» que va a Misa directamente nada más que porque las exponga así fulano o mengano? ¿Y deben quedar así libres de cualquier otro libre cuestionamiento, crítica o sospecha? ¿Porque, de lo contrario, vendrá usted aquí a «azotar» a quienes se atrevan aún a cuestionar algo de eso, con su tonito despectivo y sus (de momento) muchísimos menos argumentos de los que siempre se han empleado aquí para, no sólo cuestionar, sino intentar analizar de verdad las cosas?
–
Total que: ¿Debatimos de verdad… o no?
–
Buenas noches.

@ Misterios y Enigmas del Mundo:
–
Sí que pasan cosas extrañas, sí.
–
Habrá que dar por bueno que los gobiernos, desde luego, tienen sus secretos (tecnológicos, militares, estratégicos…) y sobre esos hay que suponer que realmente «esconden las evidencias»… ¡Porque son secretos!… Y ahí se dará el tema y el rifirrafe de los espionajes y contra-espionajes en interés de cada estado, intentando cada cual sacar ventaja de conocer los secretos del otro, y etc…
–
Lo «extraño» aquí se da cuando los supuestos «secretos» van sobre OVNIS, extraterrestres y demás. Ahí, esos supuestos «secretos», ya no «son» los que pudieran ser (o no), sino los que todo el «fandom» del tema y todo ese cierto sector de la cultura popular demanda y hasta exige que SEAN.
–
Y otra cosa «extraña», me permito añadir, es que, contra tanto «esconder las evidencias» sobre todo eso, no falte nunca algún que otro Enrique de Vicente (por ejemplo, y entre otros) que lo sabe y lo conoce todo (¡¿?!), y lo suelta y lo divulga tal cual ahí donde tenga cancha para ello. Qué curioso ¿no?. Y qué diferente de los entresijos, de los secretismos, de las verdaderas repercusiones de cualquier filtración sobre temas geoestratégicos, o geopolíticos, o de cualquier otra cosa… siempre que no sea nada de todo eso tan transmundano que, de ser un poquito así de cierto, bien que habría de tener muchísima más relevancia.
–
¡Qué extraño que todo eso «esté ahí», y que sea tan «secreto» y, a la vez, tan libremente divulgado por sus apóstoles y sus cauces, más o menos alternativos, pero de tan libre difusión!
–
Sí: Algo extraño pasa con todo eso.
–
Saludos.