Escribiendo desde el búnker
Parecía que no iba a llegar y ya estamos a semana y media del final. Y como no podía ser de otra manera, los políticos ya están empezando a anunciar la catástrofe a la población. El pasado jueves la primera ministra australiana, Julia Gillard, se dirigió a la nación en los siguientes términos:
Mis queridos amigos australianos sobrevivientes. En fin del mundo está próximo. No lo ocasionó el año 2000, ni siquiera ocurrió como consecuencia del precio del carbón. Pero el fin del calendario maya ha resultado ser cierto. Mientras que las mentes más brillantes del gobierno no han sido capaces de confirmarlo, yo confío en los chicos de Triple J que afirman que el mundo está a punto de terminar.