Computación cuántica: ¿Peligro para la humanidad?

 

La computación cuántica es un nuevo paradigma tecnológico que aprovecha las asombrosas y contraintuitivas leyes de la mecánica cuántica para realizar cálculos exponencialmente más rápido que las computadoras tradicionales.

 

 

Mediante principios como la superposición y el entrelazamiento cuántico, esta tecnología promete revolucionar campos como la criptografía, la inteligencia artificial, el aprendizaje automático, la química computacional y la ciencia de materiales. Sin embargo, su desarrollo descontrolado podría también significar graves amenazas a la privacidad, la seguridad y la estabilidad global.

 

En una computadora clásica, la unidad mínima de información es el bit, que solo puede estar en 1 o 0. En contraste, la computación cuántica se basa en qubits, que aprovechan la superposición para estar en ambos estados a la vez. Esto permite que un sistema cuántico explore un número exponencial de posibilidades en paralelo, dando saltos inconmensurables en velocidad de procesamiento. Por ejemplo, 300 qubits podrían representar más estados diferentes que todos los átomos en el universo conocido.

 

El entrelazamiento cuántico es otro fenómeno clave, donde partículas quedan correlacionadas instantáneamente sobre cualquier distancia. Esto amplifica enormemente las capacidades de una red de computación cuántica. Algoritmos especializados, como el de Shor para factorización de números primos, solo son posibles con estas propiedades cuánticas.

 

Compañías como Google, IBM y Rigetti compiten por alcanzar la supremacía cuántica. Los mejores procesadores actuales están limitados a algunas decenas de qubits y operan bajo temperaturas criogénicas para aislar su frágil estado cuántico. Todavía se está lejos de crear computadoras cuánticas prácticas. Sin embargo, gigantes tecnológicos ya fijan hojas de ruta ambiciosas para conseguirlo en esta década.

 

Los beneficios de lograr computadoras cuánticas totalmente operativas serían incalculables. Pero también lo serían los peligros si esta tecnología llega a manos equivocadas antes de establecer salvaguardas adecuadas. Una computadora cuántica podría penetrar cualquier sistema de encriptación actual y poner al descubierto los secretos más sensibles de gobiernos, bancos, empresas y personas. Los mercados financieros serían vulnerables a manipulación algorítmica. Se facilitaría el espionaje masivo violando derechos humanos fundamentales. Las amenazas a infraestructura crítica podrían desestabilizar sociedades enteras. Y una carrera armamentista se desataría ante la posibilidad de armas cuánticas incontrarestables.

 

 

La computación cuántica representa quizás el avance tecnológico más disruptivo de este siglo. Promete beneficios sociales y científicos sin precedentes. Pero las preguntas urgentes son, ¿estamos dispuestos a asumir los riesgos que conlleva? ¿Podemos confiar en que no causará un daño irreparable a nuestras sociedades? Para que esta tecnología no se vuelva una amenaza existencial, se necesitarán políticas globales, éticas y de ciberseguridad cuántico-resistentes, antes de que sea demasiado tarde.

  • Por mi parte más que dispuesto; cuantos cambios, nos enseña la historia, han ido produciéndose y salvo contadísimas excepciones, no han hecho más que mejorar las condiciones de vida del conjunto de la humanidad, así que, bienvenido sea.
    El miedo al cambio es típico de aquellos que no desean evolucionar y en su aferrar el pasado se saben carne de extinción

  • Espero que nadie con un computador cuántico te reviente la password de tu banco y te deje la cuenta en numeros rojos. O que lo haga el la cuenta de tu empresa. La computación cuántica tiene más peligro que una piraña en un bidé

  • Yo también lo espero, no te creas, pero también medio mundo andaba kgado con el efecto 2000 y, como sospechábamos muchos otros, no hubo nada.
    La computación cuántica está en pleno desarrollo y, estoy seguro, se desarrollan barreras de seguridad simultáneamente.
    En cuanto al peligro, el mismo que tiene cualquier herramienta, ninguno. El peligro reside en la mano que la maneja y la voluntad que mueve la mano.

  • @ ffg:
    No, no es igual. Sabes que ya tengo unos añitos, y me toco trabajar en la supervisión del efecto 2000 en un par de empresas. Aquello se vio venir y los riesgos no tenían nada que ver con los que presenta la computación cuántica. Y fueron mucho más fáciles de corregir.

    De lo que estamos hablando aquí, es que algoritmos de desencriptación basados en factorización en números primos, que ahora tienen tiempos de descifrado exponenciales, con la computación cuántica se convertirán en tiempos polinómicos. Lo de claves que tardarían cientos de años en ser abiertas, ahora sería cosa de segundos. ¿Crees de verdad que nadie va a tener la tentación de usar este poder para hacer el mal?

  • Estoy seguro que si, pero también de que el desarrollo traerá aparejada la suficiente seguridad.
    No puedo evitarlo, soy un optimista, tiendo a ver el vaso medio lleno.

  • Eso es bueno. Y seguro que se subsanará implementando encriptaciones resilientes a la computación cuántica, pero no será fácil

  • Nada realmente bueno ha sido fácil, ves lo que decía en otro hilo?
    Voluntad, trabajo duro y evolución



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