¿Una nueva aparición del Caballero Negro?

En la red circulan múltiples vídeos que muestran un objeto volando cerca de la Estación Espacial Internacional (ISS) mientras los astronautas realizan actividades extravehiculares. En estos vídeos, el objeto parece estar observando a los astronautas, lo que ha llevado a algunos a preguntarse si podría tratarse del famoso satélite «Caballero Negro».

Como ya he mencionado en artículos anteriores, el Caballero Negro es un mito popular en la ufología que sostiene que hay un satélite de origen extraterrestre en órbita alrededor de la Tierra, vigilando nuestro planeta desde tiempos inmemoriales.

Sin embargo, es esencial examinar los hechos de manera crítica y verificar las fuentes para entender lo que realmente está sucediendo.

Los blogs y canales de youtube que están haciendo pasar este incidente como una posible evidencia de la existencia del Caballero Negro, en todas las ocasiones eliminan  previamente el audio original de NASA. No puede ser de otra manera, ya que las conversaciones ente los astronautas y el centro de control, delatan lo que realmente  pasó. Este en concreto ocurrió el 30 de marzo de 2017, durante una caminata espacial realizada por los astronautas Peggy Whitson y Shane Kimbrough. Durante esta actividad, estaban instalando un escudo de escombros en el puerto de amarre de la ISS. Este escudo era una de las cuatro piezas destinadas a proteger la estación de micrometeoritos y desechos espaciales.

Mientras estaban trabajando, uno de los escudos se soltó y comenzó a flotar lejos de la estación. Este evento fue capturado por las cámaras de la ISS, y las imágenes del escudo flotando libremente han sido interpretadas incorrectamente por algunos como un OVNI.

Para dar un contexto más preciso, el escudo que se perdió es una pieza de 1,5 metros, fabricado de un material resistente al impacto de micrometeoritos. Los astronautas inmediatamente reportaron la pérdida al control de la misión, que supervisó la situación y confirmó que el escudo no representaba un peligro inmediato para la ISS ni para los astronautas. Se trató de una pérdida desafortunada, pero manejable, y el equipo de control en Tierra ideó una solución temporal para cubrir el área expuesta utilizando otros materiales disponibles en la ISS.

El incidente se resolvió sin mayores complicaciones, pero este es un ejemplo claro de cómo eventos cotidianos en la exploración espacial pueden ser malinterpretados y tergiversados para ajustarse a narrativas preconcebidas de teorías de conspiración.

Es crucial mantener un enfoque escéptico y fundamentado en la evidencia cuando se enfrentan tales afirmaciones. El espacio es un entorno extremadamente dinámico y complejo, y no todo objeto flotante debe ser atribuido a fenómenos extraterrestres. La proliferación de información errónea solo contribuye a la confusión y desinformación del público.

Os dejo un vídeo con el audio original del incidente para que podáis observar cómo se desarrollaron los eventos y escuchar las comunicaciones entre los astronautas y el control de la misión.