Un hombre encuentra esto en un bosque de Carolina

El misterioso hallazgo de un objeto peculiar en Carolina del Norte ha despertado tanto el asombro como la curiosidad entre los locales y los entusiastas de lo paranormal.

Justin Clontz, quien trabaja en el Glamping Collective en el condado de Haywood, tropezó con lo que muchos consideran podría ser un objeto extraterrestre mientras desbrozaba un sendero en un bosque. Clontz describió el objeto como una experiencia extraordinaria. Lo describió como un bloque de metal pesado, con la superficie cubierta con algo que parecía una «piel» o «pelaje» inusual.

El objeto, encontrado en medio del bosque, se asemeja a una carcasa de fibra de carbono quemada con robustas placas metálicas atornilladas. Según Clontz, este artefacto estaba en un área tan específica del sendero que es difícil imaginar cómo podría haber llegado allí. No comprendía cómo podía haber caído algo así sin dejar un rastro de destrucción a su paso, como un incendio forestal.

Las reacciones a este descubrimiento han sido diversas. Algunos en la comunidad y en las redes sociales han especulado sobre su origen extraterrestre, mientras que otros sugieren que podría tratarse de tecnología humana avanzada, posiblemente un dron militar o fragmentos de satélite. La idea de que sea un OVNI ha capturado la imaginación de muchos, avivando el eterno debate sobre la existencia de vida extraterrestre.

Sin embargo, las explicaciones más racionales no se han hecho esperar. Los expertos han señalado que los materiales mencionados, como el metal pesado y la fibra de carbono, son comunes en muchas tecnologías modernas desarrolladas en la Tierra. El objeto se parece a dos pedazos de escombros encontrados en  Canadá  y  Australia , que ahora se sabe que provienen del tronco que une la cápsula Dragon con la segunda fase del cohete Falcon 9 de SpaceX.

Objeto caído en Canadá

Aunque este trozo de escombros de SpaceX cayó de manera segura aproximadamente media milla por un sendero remoto en la propiedad de Glamping, los programas espaciales tanto gubernamentales como privados se han vuelto peligrosamente laxos con su basura espacial en los últimos años. Nuestro planeta es un vasto territorio en el que la probabilidad de que un trozo de basura espacial golpee a alguien, o a alguna propiedad es muy bajo, pero no cero.

El tronco de SpaceX tiene un espacio de almacenamiento interior de 10.000 litros, con una opción de extensión que amplía su capacidad a más de 34.000 litros. 

Este contenedor de carga viene con radiadores montados: conexiones eléctricas y de fluidos que le permiten regular la temperatura interna de su espacio de almacenamiento para acomodar una variedad de cargas útiles sensibles, incluidos pequeños satélites que pueden liberarse en órbita.