El 23 de septiembre Nibiru también faltará a la cita

Publica David Meade en su libro «Planeta X-Llegada en 2017», que el 27 de septiembre de 2017 Nibiru será visible en el cielo por primera vez, provocando el apocalipsis y la desaparición de la raza humana. Hasta entonces no lo podremos ver, porque se está acercando a escondidas.

En la página de Amazon en la que se vende el libro, viene publicado un extracto del mismo, y solo con leer este pequeño extracto de bazofia ya te puedes hacer una idea del resto.

Empieza diciendo que utiliza como herramienta de investigación el programa WorldWide Telescope de Microsoft.  Cuando he llegado aquí, que es por la primera página más o menos, ya me han dado ganas de dejar de leer. Un libro publicado por un experto, que utiliza como herramienta de investigación un programa online, me suena más a la producción de un vídeo de youtube que a un trabajo serio. Pero es que dice además, que desde esa utilidad podemos ver la fotografía de Nibiru en una posición que viene etiquetada como IC 5385, en la constelación de Piscis. Dice que no puede verse con telescopios tradicionales porque está muy al sur, pero la constelación de Piscis está ligeramente por encima del ecuador. Pero le da igual.

También dice que es del tamaño de Saturno, pero que puede verse solo en el infrarrojo. Debe de ser que aparte de grande es transparente, porque de otra manera no se explica que vaya llegar en 8 meses y todavía no refleja nada de la luz del sol que incide sobre él.

Pero fijaros que el objeto IC5385 no aparece indicado encima de la bola roja de la foto de arriba que pretende ser Nibiru, sino que esta ligeramente desviado. Esa bola roja solo aparece en las fotografías tomadas desde el telescopio WISE, y es así porque en realidad lo que aparece ahí no es Nibiru, sino Júpiter. La fotografía fue tomada por el telescopio WISE el 22 de junio de 2010, y en ese momento Júpiter estaba en esa posición. En las fotografías tomadas desde otros telescopios no aparece, porque fueron tomadas en otro momento y Júpiter no estaba allí.

Unos párrafos más adelante, afirma que el Vaticano posee uno de los mayores telescopios terrestres, el LBT o telescopio binocular. Meade se extraña por el interés del Vaticano en la astronomía.

En realidad no es propiedad del Vaticano. El Grupo de Investigación del Observatorio Vaticano solo participa en parte del 25% aportado por Italia. El Observatorio Vaticano es una institución formada principalmente por jesuitas doctores en astronomía, que tiene larga tradición de investigación en este campo desde hace siglos.

Un poco más adelante habla del video de Melissa Huffman, mostrándolo como una evidencia gráfica de la existencia de Nibiru. Un momento, ¿no había dicho un poco antes que no sería visible hasta el 27 de septiembre de este año? Entonces, ¿qué demonios es lo que grabó Melissa?

En el vídeo de Melissa  estabilizado podemos ver un Nibiru muy luminoso, y que ademas se mueve bastante. Tanto como que en realidad se trata de un reflejo del sol en la lente del celular.

En fin, comprobaréis que todo lo que dice Meade en su libro es un sinsentido, y si queréis un cuento de miedo mejor iros a ver una película. Seguro que es más creíble que esto.