Muere un niño de 7 años mientras estaba siendo tratado por un curandero chino

Los padres de Aidan Fenton, un niño de 7 años afectado de diabetes de tipo 1, habían llevado a su hijo a que lo tratasen en el Tasly Healthpac Centre en Hurstville, Australia. Allí, Hongchi Xiao, un presunto terapeuta chino iba a curarlo con la técnica de las bofetadas. En esta “terapia”, y por el módico precio de 1.800$ australianos (unos 1.250€), tú mismo te aporreas el cuerpo durante una semana, y así se puede curar cualquier enfermedad, incluso tumores.

Durante la sesión, Xiao le pidió a sus pacientes que ayunasen durante tres días. Esto provoca en ocasiones, que durante los aporreamientos los enfermos sufran vómitos y mareos. En la noche del pasado lunes el niño perdió la consciencia en la cama del hotel Ritz de Hurstville, donde residía con sus padres durante el tratamiento. El personal del hotel se apresuró a asistir a la familia al oír los gritos de sus padres, pero el niño llegó ya muerto al hospital.

La policía está investigando si el «sanador» les pidió a los padres que le retirasen la insulina al niño. Mientras tanto el curandero ya ha abandonado el país después de que la policía le tomase declaración.

Hongchi Xiao había llegado a Australia después de una gira por Nueva Zelanda, en la que estaba promocionando su terapia “Paida-Layin”, en la que se golpea el cuerpo hasta que aparecen heridas para “desbloquear los meridianos y expulsar toxinas”. En un seminario dado en Sudáfrica el año pasado, Xiao decía que

Cuanto mayor es el dolor significa que hay más veneno en el cuerpo. Cada uno puede ser su propio médico. Todos nacimos con un poder de auto-sanación, pero lo despreciamos y gastamos mucho dinero en medicamentos. La Naturaleza es la que cura. Los médicos solo ayudan.

Xiao tuvo problemas con la justicia en Taiwán en 2011, cuando le cobró 28.000€ a un paciente afectado de cáncer de hígado que murió tres meses después.

Es increíble que esto siga ocurriendo en el siglo XXI, pero ocurre.